Segundo álbum en solitario de Pablo Laguna, un viaje sonoro definido
como “Escalón al delirio que afilados cuchillos lanza y en melodías se
mece. Una lluvia acre, un tiro en el estómago.”
Compuesto y grabado durante los años 2018 y 2019, ésta obra representa
un cambio en el sonido de Pablo Laguna, dentro de su perpetua evolución,
donde nos encontramos con sórdidos paisajes, así como con composiciones
más cercanas a un rock progresivo aderezado con psicodelia. En “Gradus
ad Delirium” se dan la mano la electrónica con la belleza y la total
visceralidad, plagando éste disco de hirientes guitarras, bajos,
sintetizadores, baterías, teclados, violoncellos y demás barbarie…
Éste disco cuenta con la colaboración de David G. Bonacho (viola en B1),
Nacho Laguna (still guitar en A2 y guitarra eléctrica en B1), Sara
Gordon (sintetizador en B3 y violín en B1) y Lucas Antón Terrón (violín
en B1).